El proyecto del Ministerio de Ciencia tiene como meta principal el armado de un banco de muestras humanas. El rol de la farmacogenómica.
El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Argentina lanzó un proyecto para armar un mapa genético de la población local. El plan, que se llevará a cabo en conjunto con las universidades de Córdoba, Jujuy y Misiones, tendrá como uno de sus objetivos prioritarios recolectar información imprescindible para avanzar con la medicina de precisión en el país.
La medicina de precisión tiene como objetivo personalizar la atención médica, ajustarla de acuerdo con las características de cada persona.
Bautizado como PoblAr, el proyecto tiene como meta principal el armado de un banco de muestras humanas y datos asociados para analizar el patrimonio genético de los argentinos, sus hábitos y su relación con el ambiente. El estudio busca contribuir al campo de la medicina, pero también al de la antropología, la historia y la educación.
Contar con un biobanco (o banco de datos biológicos) de referencia es clave para potenciar la investigación biomédica, maximizar resultados estadísticos y trabajar en la detección de variantes genéticas y no genéticas implicadas en diversas enfermedades.
Además, permite diseñar y llevar a cabo políticas públicas en materia de medicina de precisión, ya sea para el desarrollo de estrategias de prevención como para el diagnóstico y tratamiento de trastornos tanto habituales como poco frecuentes, además del desarrollo de fármacos más específicos que puedan actuar según las características genéticas de la población.
Medicina de precisión: a la medida de cada paciente
La medicina de precisión tiene como objetivo personalizar la atención médica, ajustarla de acuerdo con las características de cada persona, para que los tratamientos sean más eficaces y también menos invasivos y con menor incidencia de efectos secundarios. De allí que la farmacogenómica forme parte de la medicina de precisión: medicamentos diseñados según las características genéticas de una población determinada.
Cuando investigadores de diversos países han comparado los genomas de personas que ingieren o reciben un mismo fármaco lograron descubrir que un grupo de personas que comparte cierta variación genética también comparte una respuesta común al tratamiento.
Un grupo de personas que comparte cierta variación genética también comparte una respuesta común al tratamiento con fármacos.
Esto se puede traducir, por ejemplo, en mayor (o menor) riesgo de efectos secundarios, necesidad de dosis más altas o más bajas para alcanzar efecto terapéutico, más beneficios o menor efecto de un tratamiento determinado o diferente duración de la terapia según sean las características del grupo poblacional.
Este tipo de información se está empleando para mejorar la selección y la dosis de fármacos al momento de tratar diversos tipos de enfermedades, desde las cardiovasculares hasta las pulmonares, la infección por VIH, el cáncer y la artritis reumatoidea, entre otras.
El secretario de Planeamiento y Políticas en Ciencia, Tecnología e Innovación, Diego Hurtado, explicó al presentar el programa que “su foco está puesto en la relación entre salud y diversidad humana; apunta a dar un primer paso en la creación de un entorno institucional para generar evidencia científica acerca de las características genómicas de los argentinos. Esto se refiere a las características genéticas de nuestra población como condición de posibilidad para el desarrollo de estrategias de medicina de precisión. La meta es que cada paciente reciba un tratamiento específico según sus características genéticas”.
El plan es, primero, tener un panorama del país a partir de seis nodos (noroeste, noreste, AMBA, CABA, zona centro y sur del país) para luego conformar un genoma completo realizando una selección de casos representativos de cada región.
Las primeras muestras empezarán a tomarse durante el primer semestre de 2022 con al menos cinco mil voluntarios. En el proceso trabajarán personas de varias disciplinas y ciencias: sociólogos, químicos, antropólogos, biólogos moleculares y médicos; becarios e investigadores; profesionales de apoyo; técnicos; personal administrativo; expertos en ciencias de la computación y en bioinformática.
– Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Argentina.
– Organización Mundial de la Salud, OMS