En los últimos años, viene disminuyendo su prevalencia en el país: en 2013 el 25,1% de la población adulta fumaba y en 2018 ese porcentaje fue 22,2%. Sin embargo, los datos oficiales señalan que todavía hay 9 millones de fumadores y que cada año mueren 44.000 argentinos por el tabaco.
El tabaquismo es la principal causa de muerte evitable en el mundo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca los daños causados por el tabaco a la salud pulmonar: más del 40% de las muertes relacionadas con el tabaco se deben a enfermedades pulmonares como el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas y la tuberculosis.
El consumo de tabaco y la exposición al humo causan cada año la muerte de más de 8 millones de personas en el mundo, de las cuales más de 7 millones son consumidores directos y alrededor de 1,2 millones son no fumadores expuestos al humo ajeno.
A la luz de estas cifras, la OMS califica al tabaquismo como una epidemia mundial. Según estimaciones del organismo internacional, para el año 2030 fumar será la tercera causa de muerte a nivel mundial, responsable del 8% de los fallecimientos.
En su séptimo informe sobre la problemática, difundido en julio de 2019, la OMS reconoce que la lucha contra el tabaco avanza, pero reclama la necesidad de ampliar las medidas para ayudar a los consumidores a abandonar productos que son mortales.
Esas acciones están incluidas en el Convenio Marco para el Control del Tabaco -vigente desde 2005 y ratificado por más de 170 países- y entre ellas se destacan vigilar el consumo de tabaco y las políticas de prevención, hacer cumplir las prohibiciones sobre su publicidad y aumentar su carga impositiva.
En el caso de Argentina, si bien la prevalencia del tabaquismo presenta un descenso progresivo y sostenido desde el año 2005 -cuando se hizo la primera Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR)-, el último sondeo realizado en 2018, la 4ª ENFR, arrojó como resultado que el 22,2% de la población adulta consume tabaco. En 2013, ese porcentaje era 25,1%.
Entre otros datos significativos, La 4ª ENFER reveló por primera vez la prevalencia de consumo de cigarrillo electrónico: el 1,1 % de la población manifestó consumirlo.
Los efectos de esta epidemia son preocupantes. Cada año mueren más de 44.000 argentinos por enfermedades relacionadas con el tabaco, lo cual representa aproximadamente el 13% de las defunciones. El tabaquismo también representa un alto costo para la economía personal, familiar y nacional. A modo de ejemplo, en 2013, el país gastó más de 33.000 millones de pesos en atender enfermedades producidas por el consumo de tabaco, lo cual representó el 7,5% del gasto total en salud de ese año.
Según datos de la Asociación Argentina de Tabacología (ASAT), tan solo el 10% de los fumadores argentinos recurre al médico para dejar de fumar y de ese porcentaje solo un 2,5% consulta a un médico especialista.
En el país hay cerca de 400 centros para dejar fumar -la mayoría gratuitos- a los que se puede acudir para recibir tratamiento integral de cesación tabáquica, que incluya, entre otros ejes, asesoramiento sobre el uso apropiado de productos de reemplazo de nicotina u otros medicamentos.
El consumo en los jóvenes
En septiembre pasado, se conocieron los datos preliminares del capítulo argentino de la 5ª Encuesta Mundial de Tabaquismo en Jóvenes (EMTJ), que arrojó cifras preocupantes:
- 20,2% de los adolescentes consume algún tipo de producto de tabaco.
- 35,3% está expuesto al humo de tabaco ajeno en el hogar.
- El 32,2% vio fumar a alguien dentro del colegio.
- 8 de cada 10 adolescentes comentaron que no tuvieron problemas para comprar cigarrillos, aunque está prohibida la venta a menores.
- Aunque su venta no está autorizada en el país, el 7,1% de los chicos de entre 13 y 15 años usa el cigarrillo electrónico para vapear, lo que representa seis veces más que en los adultos.
El cigarrillo electrónico calienta un líquido con nicotina y otras sustancias químicas que produce un aerosol que el usuario inhala al vapear. Su uso creciente entre los jóvenes es una preocupación a nivel mundial.
Las alarmas se encendieron con el número de enfermos, incluidas seis muertes confirmadas por el uso de estos dispositivos en Estados Unidos. A mediados de octubre, en la Argentina se registró el primer caso de un paciente hospitalizado por una lesión pulmonar asociada con su consumo.
4° Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR 2018) Ministerio de Salud y Desarrollo Social de la Nación; 5° Encuesta Mundial de Tabaco en Jóvenes (EMTJ 2018); Asociación Argentina de Tabacología (ASAT); Séptimo Informe sobre la epidemia mundial de tabaquismo de la Organización Mundial de la Salud (OMS).