Una nueva combinación farmacológica de terapias dirigidas , cuyo estudio clínico se encuentra en Fase II, abre un camino de posibilidades para obtener una mejora en la calidad de vida de pacientes postmenopáusicas con metástasis por cáncer de mama HER2 (+) previamente tratados y no pasibles de ser tratados con cirugía.
La industria farmacéutica mantiene desde el siglo pasado un sostenido esfuerzo de investigación para acercar a la población medicamentos innovadores para tratar enfermedades y mejorar la calidad de vida de las personas.
Una muestra de ese compromiso con la innovación al servicio de la salud es la mayor supervivencia en cáncer alcanzada gracias a la investigación de farmacología clínica. Este destacado avance incluye la investigación de medicamentos con personas voluntarias en hospitales públicos e instituciones de salud privadas, en manos de profesionales idóneos y con el seguimiento de comités de ética.
Este ensayo no usó los clásicos fármacos citotóxicos sino terapias dirigidas y anticuerpos monoclonales. Fue un estudio de fase II (con objeto de definir dosis y eficacia inicial) y es liderado por el Grupo español Solti. Representa en la actualidad una esperanza para las pacientes afectadas de un cáncer de mama avanzado que no están teniendo buenos resultados con los tratamientos disponibles para su enfermedad.
Los resultados de la primera fase del estudio clínico, denominado SOLTI1303-PATRICIA y liderado por el Grupo Solti de España, fueron publicados el 16 de septiembre en la revista Clinical Cancer Research de la Asociación Americana para la Investigación del Cáncer (AACR, por sus siglas en inglés).
Hasta ahora, las pacientes afectadas de un cáncer de mama avanzado son tratadas con una combinación de quimioterapia. El nuevo ensayo evalúa la eficacia de la combinación de una terapia dirigida (un inhibidor de CDK4/6) y un anticuerpo monoclonal (una terapia anti-HER2), con o sin receptores hormonales, para tratar a pacientes postmenopáusicas con cáncer de mama metastásico HER2-positivo previamente tratado e irresecable.
La HER2 es una proteína de la membrana de las células mamarias que promueve su crecimiento. Las células del cáncer de mama con niveles más altos de lo normal de HER2 se llaman HER2-positivo. Este tipo de cáncer supone el 18% de todos los tumores de mama y se estima que, de éstos, entre el 30 y 40% de los afectados podrán beneficiarse de este nuevo abordaje terapéutico.
Según la publicación de la revista de la AACR, los resultados muestran que la combinación de estos fármacos es segura y que las pacientes del subtipo luminal (clasificado según el test PAM50), que representa en torno al 40% de las afectadas testadas, “mejoraron significativamente”.
El ensayo estudia el impacto de este tratamiento en la supervivencia libre de progresión (SLP) de las pacientes, un tipo de tasa de supervivencia que mide la cantidad de tiempo durante y después de la medicación o tratamiento en el que la enfermedad que está siendo tratada no empeora.
“La media de supervivencia libre de progresión con el subtipo luminal (el subtipo molecular del tumor mamario) es de 10,6 meses frente al resto, que es de sólo 4,2 meses. Esto se traduce en que se aumenta más del doble”, informó la vicepresidenta del Grupo Solti, Eva Ciruelos, e investigadora principal del estudio, coordinadora de la Unidad Multidisciplinar de Cáncer de Mama del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid. En adelante, los investigadores apuntan a confirmar el potencial biomarcador de respuesta en futuros estudios clínicos.
Estos resultados indican que se seguirá investigando esta terapéutica con el rigor científico que viene siguiéndose, para que de confirmarse los resultados en estudios clínicos de Fase III pueda ser aprobado y ponerse a disposición de las pacientes que así lo requieran.
Revista “Clinical Cancer Research” de la American Association for Cancer Research (AACR); Grupo Solti (España).