Permite desarrollar terapias efectivas y específicas para cada patógeno en particular en menos de una semana. No daña a otros microorganismos beneficiosos para el cuerpo.
El último informe del Sistema Mundial de Vigilancia de la Resistencia y el Uso de los Antibióticos de las Naciones Unidas advirtió sobre el agravamiento de la resistencia antimicrobiana, un problema sanitario de alcance mundial al igual que la pandemia de coronavirus.
La resistencia a los antibióticos no es nueva, ya en 1945 el bacteriólogo Alexander Fleming dijo, después de ganar un premio Nobel por su participación por el descubrimiento de la penicilina, que el uso excesivo del fármaco podría conducir a formas de bacterias resistentes a sus efectos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó una lista de prioridades que abarca a una docena de tipos de bacterias resistentes a los medicamentos para las que se necesitan nuevos antibióticos y el Grupo de Coordinación Interagencial de las Naciones Unidas sobre la Resistencia a los Antimicrobianos señaló recientemente que las infecciones resistentes a los medicamentos causan al menos 700.000 muertes cada año en todo el mundo.
Las infecciones resistentes a los medicamentos causan al menos 700.000 muertes por año en todo el mundo.
Si nada cambia, 10 millones de personas al año podrían morir a causa de infecciones resistentes para 2050. Es decir que, si no se logra controlar la resistencia bacteriana, las enfermedades generadas por ella misma podrían matar a más personas que el cáncer.
Enfrentar a las bacterias multirresistentes
Hay, desde la ciencia, diversos caminos para frenar este aumento de la resistencia a los antimicrobianos. Grupos de investigaciones buscan comprender mejor cómo y cuándo persisten los genes que confieren resistencia a las bacterias. Otros analizan herramientas para revitalizar el arsenal antimicrobiano existente para superar las defensas bacterianas y algunos investigadores están proponiendo enfoques innovadores para el desarrollo de nuevos antibióticos.
Dentro de este último enfoque, un nuevo tratamiento mostró resultados prometedores contra las bacterias resistentes a los medicamentos. Se trata de una tecnología, desarrollada por expertos de la Universidad de Colorado, capaz de matar bacterias mortales resistentes a múltiples fármacos en tiempo real. La hipótesis de los científicos es que podría emplearse para generar terapias dirigidas que reemplacen a los antibióticos tradicionales.
La nueva tecnología podría emplearse para generar terapias dirigidas que reemplacen a los antibióticos tradicionales.
Los expertos desarrollaron una plataforma terapéutica específica a la que bautizaron FAST (por lo veloz) que puede desarrollar terapias de ácido nucleico peptídico (PNA, una versión sintética de ARN) eficaces contra las bacterias multirresistentes en una semana.
FAST se basa en la utilización de herramientas de bioinformática para diseñar ANP de secuencia específica que se dirigen a vías y/o genes de bacterias no tradicionales y luego realiza la síntesis, la validación y las pruebas de eficacia de los ANP seleccionados al mismo tiempo. Básicamente, la molécula de PNA se adhiere al ARN bacteriano, impidiendo que lleve a cabo su función, lo cual puede ser mortal para el patógeno.
Como prueba de concepto, estos PNA fueron testeados ante cinco bacterias multirresistentes: Escherichia coli resistente a antibióticos carbapenémicos, Klebsiella pneumoniae, Metalo-beta-lactamasa-1 de Nueva Delhi que porta Klebsiella pneumoniae y Salmonella enterica MDR.
Los ANP mostraron una inhibición significativa del crecimiento de bacterias en el 82% de los casos, y casi el 18% de los tratamientos produjo una disminución superior al 97%.
Además de la eficiencia para eliminar las bacterias peligrosas, esta tecnología ofrece la enorme ventaja de que no ataca a las bacterias buenas o beneficiosas que hay en el organismo; actúa puntualmente sobre el microorganismo blanco, tal y como lo hace una terapia dirigida y específica contra una bacteria o un virus en particular.
El estudio es una prueba de concepto, es decir que se probó en cultivos celulares en el laboratorio. El próximo paso será testear su funcionamiento y los resultados obtenidos en animales vivos. Pero es un comienzo alentador.
– Eller, K.A., Aunins, T.R., Courtney, C.M. et al. Facile accelerated specific therapeutic (FAST) platform develops antisense therapies to counter multidrug-resistant bacteria. Commun Biol 4, 331 (2021). https://doi.org/10.1038/s42003-021-01856-1
– Organización Mundial de la Salud.
– Sistema Mundial de Vigilancia de la Resistencia y el Uso de los Antibióticos.