Es un componente esencial de la calidad asistencial, pero sólo en los últimos años comenzó a considerarse como una cuestión primordial.
La meta de la atención médica es el cuidado del paciente, pero en todo ese proceso y considerando en particular el uso de medicamentos, hay un cierto grado de riesgo que puede llevar a un evento adverso. De hecho, el riesgo de que una persona tenga un problema ocasionado por la atención médica es muchísimo mayor al de que, por ejemplo, sufra un daño en un avión: uno cada 300 contra uno en un millón.
Las situaciones de riesgo pueden estar originadas por muchos factores como por ejemplo: problemas de la propia práctica clínica, con los procedimientos, en el sistema o eventos adversos de los productos que se utilizan. En algunos casos, las fallas provienen de errores básicos, como un incorrecto lavado de manos.
La seguridad del paciente, también entendida como el intento consciente de evitar lesiones causadas por la asistencia, es un componente esencial de la calidad asistencial. El objetivo es generar estrategias que identifiquen estas fallas o errores en los procesos de atención, para evitarlas y disminuir el impacto en caso de que ocurran. Sin embargo, sólo en los últimos tiempos comenzó a considerarse una cuestión primordial. Buscando poner el tema en agenda, en 2004 la Organización Mundial de la Salud creó la Alianza Mundial para la Seguridad del Paciente e instituyó el 17 de septiembre como el Día Mundial de la Seguridad del Paciente.
Para graficar la magnitud del problema, la agencia de Naciones Unidas resaltó 10 datos que impactan, y llaman a los actores del sistema de salud a prestar especial atención.
1. El nivel de morbimortalidad por los daños causados a los pacientes es equiparable al de la tuberculosis y el del paludismo. Según las estimaciones más conservadoras, son la 14ª causa de morbimortalidad mundial.
2. Uno de cada 10 pacientes sufre daños durante su internación. El 50% de ellos podría prevenirse y aproximadamente dos tercios del total de eventos adversos ocurre en países de ingresos medianos y bajos.
3. El uso incorrecto de medicamentos es una de las principales causas de daños evitables en los sistemas sanitarios. El costo global de los errores de medicación asciende a US$ 42.000 millones anuales. Se producen por deficiencias en el sistema de administración de la medicación, cansancio de los trabajadores sanitarios, o condiciones inadecuadas del entorno laboral, entre otros.
4. 14 de cada 100 internados sufren una infección hospitalaria. Sólo en la Unión Europea, son 3,2 millones al año, y 37.000 de ellos fallecen por esa causa. La frecuencia de las infecciones se podría reducir hasta la mitad con medidas de prevención simples y baratas, como la higiene correcta de manos.
5. Más de un millón de pacientes mueren al año por complicaciones quirúrgicas. Además, siete millones sufren discapacidad como consecuencia de una cirugía. Las tasas de mortalidad perioperatoria y relacionadas con la anestesia disminuyeron en los últimos 30 años, pero siguen siendo significativas, en especial en los países de ingresos medianos y bajos.
6. La falta de precisión o retraso en el diagnóstico afecta a todos los entornos médicos. Sólo en Estados Unidos, los errores de diagnóstico alcanzan al 5% de los pacientes en centros de atención ambulatoria y pueden causar cerca del 10% de las defunciones.
7. La gestión de los efectos adversos representa el 15% del gasto sanitario. Son miles de millones de dólares al año. Los más costosos: la tromboembolia venosa, la úlcera de decúbito y las infecciones.
8. La inversión en mejora de la seguridad del paciente redunda en ahorros económicos importantes. Sólo tomando datos de EE.UU., además de mejorar la evolución de las enfermedades, en cinco años se ahorraron 28.000 millones de dólares en los hospitales del programa Medicare.
9. La radioterapia mejoró la atención primaria, pero la exposición a las radiaciones representa un problema para la salud pública. Cada año se realizan más de 3.600 millones de radiografías (el 10% a niños), 37 millones de procedimientos de medicina nuclear y 7,5 millones de radioterapia. Es la actividad que más expone a la población a fuentes artificiales de radiación.
10. La mitad de los errores en la atención primaria son de carácter administrativo. Los asociados a los sistemas y procesos de prestación de servicios son los que se notifican con mayor frecuencia.
Organización Mundial de la Salud, Hospital Universitario Austral, Revista Médica Clínica Las Condes